12 de diciembre de 2009

Más sobre el accidente del viajero de un bus urbano de Ourense.

La Voz de Galicia recoge en su edición digital lo siguiente acerca de lo que era anteayer noticia:

Ni la empresa concesionaria del servicio de transporte urbano ni el Concello de Ourense tuvieron responsabilidad alguna en el grave accidente que sufrió el pasado 25 de noviembre un viajero de un autobús urbano de 75 años, quien sufrió una lesión medular que lo ha dejado tetrapléjico al golpearse la zona cervical contra la máquina expendedora de billetes debido a un brusco frenazo del conductor. Así lo aseguró ayer a La Voz el edil de Transporte Público de Ourense, Manuel Herminio Iglesias, quien atribuye lo ocurrido a una imprudencia por parte del viajero. «Fue un despiste por parte de él», afirmó el concejal, quien basa su afirmación en la información que maneja sobre el accidente.

«Al parecer hay varios testigos que aseguran que el hombre iba de pie en el autobús y que no iba sujeto en el momento del accidente, sino que estaba hablando con otra persona cuando el conductor tuvo que realizar un frenazo debido a que se le cruzó una furgoneta, lo que provocaría que se cayera hacia atrás y se golpease», explicó el político.

Ante esto, ninguna responsabilidad habría, según él, por parte de la concesionaria, del conductor o del propio Ayuntamiento. «Fue un imprevisto y por desgracia, estas cosas ocurren», dijo Iglesias.


Respecto a las medidas de seguridad de las que están dotados los buses que realizan rutas urbanas, el edil explicó que todos los vehículos que componen la flota de la ciudad, que gestiona la empresa Urbanos de Ourense (del grupo Avanza), están homologados y cumplen los requisitos necesarios.

Según afirmó el edil, estos buses están integrados en lo que se denomina clase 1 y, por tanto, sujetos a un reglamento que prevé que en su interior viaje más gente de pie de la que pueda ir sentada. Por ello, los vehículos están dotados de barras de sujeción y correas que facilitan que los pasajeros estén seguros durante el desplazamiento.

«Si un vehículo de estas características no cumpliese con los requisitos en seguridad ni siquiera llegaría a matricularse», aseguró Iglesias. «No hay ningún reglamento que obligue a que estén provistos de almohadillas delanteras o zonas acolchadas para evitar golpes como el que sufrió Delfín», aseveró el concejal, quien no prevé que debido a este accidente se realicen cambios en el interior de los buses urbanos.

En todo caso, y en respuesta a la intención de la hija del perjudicado, quien en declaraciones a este periódico aseguró que está dispuesta a emprender acciones legales para reclamar daños y perjuicios, el concejal admitió que «está en su derecho de hacerlo». De todas formas, no comparte la opinión de esta, que atribuye la responsabilidad del golpe que ha dejado lesiones irreversibles a su padre a una imprudencia por parte del chófer del bus. «Los conductores están advertidos de que deben circular despacio y efectuar una conducción tranquila para evitar accidentes a los pasajeros. En todo caso, este suceso no se debió a una negligencia del chófer, sino a un frenazo que se vio obligado a dar debido a que se le cruzó una furgoneta en la calle, no pudo hacer otra cosa», insistió el edil.

En la misma línea, el gerente de la concesionaria, Manuel Maneiro, tampoco ve responsabilidad alguna del conductor en el accidente. De todas formas, mantiene su compromiso de apoyar a la familia en aquello que necesiten.


No podemos decir más que lo ocurrido ha sido realmente fruto de la fatalidad, pero cuando las circunstancias se suman, en ocasiones no se puede evitar por muchos medios que tengamos a mano. En fin...

No queremos dejar de traer aquí mismo una muy interesante reflexión acerca de las aletas de tiburón y que está en relación indirecta -pero está- con este suceso. Se trata de un comentario en el blog de Troleros&buseros -en la entrada de este suceso- y con permiso del blog y de su autor -Spidertrolero-, lo destacamos en este post:

Otra cosa más. ¡¡ VIVAN LAS ALETAS DE TIBURON !! Si no fuesen por estas, tendríamos serios problemas todos los días de este tipo, de vehículos que, para adelantar a alguien que estuviese aparcando se interpondría en nuestro camino justo en el momento en el que estamos pasando nosotros o cosas similares. Gracias a ellas, solo debemos tener cuidado, y mucho, en los cruces, pero como somos muy profesionales y ya lo sabemos evitamos muchos, pero que muchos golpes todos los días.


Feas serán, criticadas también, pero a ver quién tiene narices de razonar en contra de esta teoría. ¿No habría sino más accidentes de este tipo si el Carril Bus careciese de ellas? (...) Pues eso.
Precaución siempre, amigos. Y siempre suerte.

Fuente: La Voz de Galicia

6 comentarios:

  1. En primer lugar mis condolencias a la víctima y a su familia. Espero que la familia del accidentado lleve el caso a los tribunales y que sean éstos quienes decidan sobre la culpabilidad o no de la empresa concesionaria, y del ayuntamiento, me explico: los buses salen del carrocero perfectamente homologados, pero cuando llegan a las instalaciones de las empresas concesionarias, se les instalan todo tipo de máquinas: expendedoras de billetes, pantallas, canceladoras,..., y a los buses no se les vuelve a pasar ningún proceso de homologación posterior, a diferencia de lo que ocurre en otros países europeos, en donde el proceso de homologación se pasa justo antes poner el bus en circulación, y siempre que se le hace una modificación posterior significativa. Además, en esos países europeos los dispositivos instalados han pasado por un proceso de investigación y desarrollo previo, están a su vez homologados, son ergonómicos y cumplen con la normativa CE. Dudo mucho que la empresa consecionaria y el ayuntamiento estén totalmente libres de culpa, pero que sean los tribunales quienes lo decidan.

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  2. Te informo que cuando un autobus pasa la ITV también le miran esos detalles, de hecho miran incluso la altura de las canceladoras y demás máquinas para cumplir con la normativa. Si no cumplen la normativa tienen que volver al taller para revisarlo.
    Otra cosa, si no vas agarrado en un autobús cuando pega un frenazo te puedes dar en mil sitios, en las barras de sujección, contra un cristal, contra un asiento, contra la maleta de un pasajero, contra otro pasajero, en fin que no creo yo que la canceladora tenga la culpa. Lo que tiene es que concienciarse la gente de lo que es un vehiculo en movimiento, que no se puede ir leyendo un periodico y de pie como tengo visto yo algún pasajero.
    A los pasajeros también abría que homologarlos porque muchos no saben utilizar los medios de transporte.

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  3. Lo de las aletas de tiburón no es una teoría, es la pura realidad. El día que las quiten, que las quitarán ya lo verás, ya se verán lo eficaces que son. Ya no solo para el buen funcionamiento del servicio, bien lo sabemos los que pasamos por ese carril todos los días. Si las quitan volverá la doble fila seguro o bien se aparcará en el propio carril bus, entorpeciendo no solo la circulación de los buses sino toda la circulación de los vehículos que vamos por esa vía. Ya he llegado a escuchar a la gente que vive por allí que ahora se circula mucho mejor que antes, sin tanta retención. Ya se empiezan a escuchar valoraciones positivas del tan "odiado" carril.

    Con respecto a las homologaciones, o no, de los elementos que lleva el bus dentro solo diré una cosa. Estos vehículos pasan una ITV cada seis meses. Si no estuviesen homologadas ya haría mucho tiempo que las hubiesen modificado.

    Un saludo y gracias por haceros eco de esta y otras opiniones que damos los profesionales de la rosca.

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  4. Lo decimos a 14 de diciembre de 2009: Creemos que, como tú afirmas, como quiten las aletas de tiburón, se armaría un gran lío circulatorio de proporciones inimaginables (¿habéis visto 2012...:-)?).

    Esperamos no tener que recuperar estos comentarios dentro de años por que a alguien se le ocurra la posibilidad de eliminarlas... ¿Habrá nacido semejante lumbreras, con perdón?

    Cada uno que opine lo que quiera, pero mejor aprender de los errores ajenos que tener que hacerlo de los nuestros.

    Saludos a todos.

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    1. Vaya..., fijáos que curioso es el destino, que practicamente dos años más tarde del comentario del enlace inferior, el Carril Bus va y es aniquilado.

      La diferencia es que la herencia forzada es el concepto de Vía prioritaria Vigilada, a punto de estrenarse en febrero de 2012.

      En las noticias de esas fechas es donde deberéis ojear las evoluciones.

      Por cierto, el citado "lumbreras" que ni siquiera imaginábamos resulta ser el ya alcalde Carlos Negreira y su equipo encargado de la movilidad para el año del fin del mundo.

      Quién nos lo iba a decir en diciembre de 2009...!! XD

      http://busurbano.blogspot.com/2009/12/mas-sobre-el-accidente-del-viajero-de.html?showComment=1260812699683#c1285867786592360693

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  5. Las pruebas pasadas en la ITV son arcaicas y carentes de todo rigor técnico actualizado, de hecho, su afán no es el velar por la seguridad pública, sinó meramente recaudatorio. Desconozco quien o qué ha sido el culpable del desgraciado accidente de Orense, no sé si de la canceladora, de la máquina de cobro o de la impresora de billetes, por eso sería bueno que un tribunal lo investigase. No obstante, es obvio que un bus, como los buses urbanos coruñeses, cuyo habitáculo próximo al conductor ha sido modificado de tal manera con tanto dispositivo y de tan enormes dimensiones (no entiendo el porqué hoy en día una canceladora tiene que tener el mismo tamaño que una canceladora de los años 80, ¿ya tenían hecho el molde y para qué invertir en otro nuevo...?, la impresora de billetes es demencial: grandísima y que además está fallando continuamente, la máquina de cobro es como un PC de la década pasada,...), en fin, el habitáculo inicial ha sido modificado con multitud de dispositivos angulosos y salientes respecto a la carrocería original. Por otro lado, el etiquetado CE es mucho más que el etiquetado de cada una de las partes que lo componen por separado, es el etiquetado de un todo, de un conjunto, y los dispositivos de cobro de Coruña carecen de ese etiquetado, sin el cual, incumplen la normativa europea vigente. Pero claro, ese etiquetado exige del cumplimiento de unas normas de fabricación, unos estándares de calidad, unas homologaciones y una ergonomía, que cuestan unos dineros, y que de no llevarlo a cabo, acaba en el bolsillo de alguien, y como en este país nunca pasa nada..., y si pasa parece que siempre es culpa de los viajeros: viajeros homologados, ¡qué gran idea!, digna de una mente en consecuencia.

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